Llevar a cabo un correcto aislamiento
A la hora de llevar a cabo una obra y diseñar un nuevo espacio, son muchos los factores que se han de tener en cuenta para garantizar la seguridad y comodidad de aquellos que van a habitarlo en un futuro. Principalmente, una de las apuestas es la elección de materiales de máxima calidad con los que se trabaja, esto hará que todas las personas estén a gusto y evitando riesgos.
En esta época del año, y ya casi metidos en el invierno, con la bajada de las temperaturas propia de la estación, una de las claves será conseguir llevar a cabo un correcto aislamiento para que el frío no penetre desde el exterior al interior de la vivienda, además de conseguir guardar el calor en la misma.
Hoy te hablamos de materiales para proteger del frío en la construcción, para tus proyectos tanto de obra nueva como reformas. ¡Vamos a descubrirlos!
Materiales adecuados para proteger del frío en la construcción
En primer lugar hay que conocer la existencia de los materiales para proteger del frío y las diferentes funciones que tiene cada uno para las partes de la vivienda o local comercial en el que vayan a ser instalados.
- El poliuretano: es un aislante sintético muy efectivo térmicamente que se usa generalmente proyectado como espuma. Se utiliza en aislamiento, construcción sostenible y todo tipo de industrias. Su versatilidad lo hace imprescindible tanto en aislamiento térmico como en acústico, además de para la impermeabilización, en la decoración y en la fabricación de otros elementos como la perfilería de las ventanas.
Para la construcción, el poliuretano aporta una importante mejora en el aislamiento térmico de las fachadas, muros, cubiertas y paredes, así como en la envolvente de los edificios, eliminando puentes térmicos y grietas. Se presenta en forma de planchas o paneles sándwich, su aplicación es rápida y eficiente, los resultados duraderos y la inversión muy rentable.
- Espuma de polietileno: es un producto esencial en numerosos trabajos de construcción, reformas y bricolaje. Su función principal es la de sellar y rellenar huecos. También es un excelente aislante térmico y acústico. La espuma de poliuretano se puede aplastar, rayar y estirar sin problema. Cuenta con multitud de propiedades y además, es un producto totalmente inocuo, no representa ningún peligro para el ser humano.
- Ventanas de PVC: son idóneas para aislar a nivel térmico y acústico. Este material es un magnífico aislante, lo que significa que ayuda a mantener tu hogar fresco en verano y cálido en invierno. Esto puede llevar a un ahorro significativo en costos de energía a lo largo del tiempo. Además, se puede adaptar a una variedad de estilos arquitectónicos y está disponible en una amplia gama de colores y acabados.
- Suelo radiante: es un sistema que cada vez cuenta con más adeptos. Emite radiación térmica que calienta el suelo, las paredes y el techo de cada estancia. Está formado por un circuito de tuberías que se instala bajo el suelo de la vivienda y por las cuales circula agua. El agua se calienta a través de una caldera o aerotermia y emite continuamente calor por radiación.
Por último, el uso de puertas macizas, la fibra plástica o la madera, también serán otra de las opciones a considerar para aislar del frío una vivienda.
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